¿Asamblea constituyente o destituyente?

Amanecimos con 33 artículos aprobados en una sola noche sin discusión, sin debate, al vuelo, a la brava. Yo aposté a la Constituyente pero me veo obligado a votar contra ella, porque lo que se ha desatado es el pandemonium literal: todos los demonios de bajas pasiones se han desatado a través de las manos alzadas y las cabezas gachas frente al caudillo. El último obstáculo, el "exceso de democracia" de Acosta ha sido superado y cual panzer el proyecto constituyente arrasa el país como si de la Polonia ocupada se tratase.

Y lo aprobado hasta ahora es gravísimo: propiedad condicionada al capricho del Estado, libertades conculcadas, y ya se viene el paquetazo agrícola que nos costará 500 millones de dólares, reversión ilegal de concesiones mineras, renegociación forzada de contratos, subida de impuestos y por ende subida de precios, destrucción de incentivos para producir, cierre de exportaciones de arroz y un largo etcétera.

Lo que ha sucedido con Acosta es el último abuso, obligarlo a renunciar, ha colmado nuestra paciencia, paciencia ya endeble desde que nos han tocado el bolsillo, esto no va más, y se inician las protestas desde el jueves según se anuncia.

Y que no se le heche la culpa a partidocracia que afortunadamente ya no pinta nada, ¿quiénes son la mayoría? ¿quiénes son los presidentes, vicepresidentes y matoría de vocales? ¿quiénes son los presidentes de las mesas? ¿quiénes decidieron el futuro de Acosta, fue la minoría o el buró político (que nadie ha elegido)? El mediocre busca las causas de sus errores en otros, así que no me vengan con mediocridades.

Hasta aquí llegó mi última esperanza por un proyecto constituyente que nos brindaría una mejor marco jurídico para progresar en libertad.